Situado junto al río Duratón, en un paso estratégico entre las carreteras de Segovia Aranda de Duero, Sepúlveda y Fuentidueña está San Miguel de Bernuy.

Dentro del pueblo podemos ver la iglesia de San Miguel Arcángel, de estilo románico; la ermita de la Virgen del Río, con elementos decorativos de las ermitas del río Duratón; un puente de piedra posiblemente de época medieval (ver monumentos); las típicas bodegas subterráneas, que nos hablan de la tradición vitivinícola de estas tierras; restos de un lagar; un antiguo molino harinero, hoy convertido en centro de turismo rural...

Pero lo más espectacular de San Miguel de Bernuy es su entorno natural. Donde el río se confunde con la cola del embalse de las Vencías, el curso fluvial muestra una red de meandros al pie de los cortados calcáreos. La ribera de juncáceas junto con estas fuertes pendientes rocosas, el recurso agua, el llamativo planeo de los buitres y las ruinas de las ermitas que coronan lugares inaccesibles (ver monumentos), forman un paisaje de belleza singular. De ahí que se denomine a esta zona como "Las Hoces Septentrionales del Río Duratón" y se luche por la figura de protección que se merece (ver espacios naturales).

En el mismo municipio podremos disfrutar también de un estupendo cordero asado que tanta fama tiene por estas tierras.